miércoles, 15 de octubre de 2014

¡Que “Farrowta”!

Que fiestón que se está pegando la revolución no? ¡Peor que matrimonio en el campo! ¡Ocho días antes y ocho días después! ¿que digo ocho días antes y ochos días después? Esto ya va ocho años del antes y ya veremos como va el después. Lo peor de todo esto es que la farra ya se está pasando de la raya; chuma general, borrachera de revolución, sandungueo administrativo, lleve total!

Los antiguos romanos deben estar queriéndose levantar de sus tumbas al ver el bacanal revolucionario que se están pegando aquí los de los corazones ardientes! Sif! Es que en Roma solamente se metían al relajo, pasaban bonito y cada cual para su casa; con la revolución que no la para nada y no la para nadie, cada uno de los que se van incluyendo en la farra algo tiene que ir metiendo para luego ir llevando, me explico: En el bacanal del infinito amor todos cobran por meter algo: el economista por meter miedo, 6957; Omar Simon por meter las maracas, 6122; Freddy Ehlers por meter el incienso, 6122, el ñañito del guerrillero Jarrín por meter los aplausos, 5566; Alexis Mera por meter.... bueno no se que meterá pero algo ha de meter, 6122; el Gerente del BIESS, por meter el quirografario 13.356, y entre el subgerente y más directivos del BIESS por meter el ambiente entre 5.000 y 10.500 cada uno; todos estos se meten estas cantidades mes a mes, digo, para que no se vayan a confundir y solo he nombrado a unos pocos.

Pedrito Delgado por meter la pata 400.000; el señor Hussey por ayudarle a Pedrito a sacar la pata 400.000 más; Gastón Duzac por meter “la influyencia” 800.000; Danny Glover por meter la mano 330.000; Mía Farrow por meter la otra 188.000, Mc Squared por meter la propaganda para levantarle la imagen al economista seis millones cuatrocientos mil sí, sí, lo leyó bien (USD. 6400.000); la alcaldesa de Richmond Gayle Mclaughlin (donde tan sera eso) también por meter la manito, 4.499; para que la fiesta tenga su buena publicidad un millón dos cientos mil dólares para la página web; y para que no nos falte la música había que pagar un millón quinientos mil dólares para que durante el chupe no nos falte nuestro gran éxito “All you need is love”; pero para no perder esa bonita costumbre hay que pagar el localito para la sabatina; que entre musica, luces, artistas, silletas colitas y sánduches sale a 150.000 por semana si ya se han pegado cuatrocientas farras llegamos a la suma de 60 millones de dolares pasando bonito. Ah! Y sin contar lo que nos cuesta cada mes nuestro célebre huésped don Julián que ese en cambio se ha dedicado a meter intriga desde la embajada en Londres.

Ni tomando complejo B se aguanta semejante farrón y despilfarro, todos embriagados de revolución y de “amor por la patria”, se juran amor eterno, somo como hermanos, hablan de la amistad, vomitan inequidades, van a cambiar el mundo!

Y ahora, el chuchaquí? Claro que paguemos los pendejos! Para eso estamos pues, para contribuir con la patria, para aportar lo que todos los días ganamos especulando y rascándonos la panza, dedicados al ocio y a la vagancia, algo tenemos que aflojar pues, acuérdense: nada para nosotros todos para “PAIS”, perdón, todo para la patria; es decir, para la sabatinas, para la propaganda, para las vallas, para Mera, para Ehlers, para el economista, para fulano, mengano y perencejo; para la colita, pal sanduchito, para la marcha, pal festival, para la tarima, para el Glover y para la Farrow; ¡Qué Farrowta!

Asi que calladitos, porque este gobierno también es el que ha puesto 6 veces más impuestos que todos los gobiernos anteriores juntos: Que el impuesto a la tierra a partir de 70 hectáreas, que el impuesto a la salida de divisas, que el impuesto a los carros de lujo, que el impuesto único del banano, que el aumento del impuesto a los licores, que el impuesto a las botellas plásticas, que el impuesto verde a los carros, que el aumento del impuesto a los cigarrillos, que el impuesto a las compras en el exterior, que el impuesto a los activos en el exterior para las instituciones financieras, que el anticipo mínimo del impuesto a la renta; que ya mismo el impuesto a los préstamos y al pago con tarjeta de crédito, que el impuesto a los hot dogs, papas fritas, salchipapas y otras delicias; que hagámonos de los fondos de los profesores, que empeñemos el oro, que nos presten los chulqueros, usureros imperialistas del Banco Mundial y, que se vengan las utilidades de las telefónicas, pero que la farra no termine jamás, y como diría un buen parrandero cubano: Seguimos? Siiiii! Paramos? Nooooo!

Quiero terminar parafraseando a nuestro señor cuando le preguntaba a algún personaje de las tradicionales fabulas quiteñas que le encantaba la farra, el chupe y el relajo: ¿hasta cuando economista?


Permiso...